Todos a tu alrededor son impostores disfrazados como amigos y familia. Todos los días, luchas con la tentación de comerte tus propios dedos. Te despiertas una mañana y sabes con certidumbre que estás muerto.
Estas experiencias pueden sonar como sacadas de una película de terror, pero para un puñado de personas, síntomas como estos son una realidad. En años recientes, investigadores han hecho buenos avances en diagnosticar y tratar trastornos mentales, y más y más del publico han entendido que las condiciones como la depresión, el trastorno bipolar, y la esquizofrenia no son producto de la imaginación y pueden tener causas y efectos biológicos.
Desafortunadamente, muchas enfermedades mentales aún se mantienen sin entenderse, estigmatizadas, y poco investigadas. Entre estas están condiciones extremadamente raras que suenan como algo de pesadillas y no como algo que se diagnostica en el consultorio de un doctor.
Aquí están cuatro de los trastornos mentales más extraños y más confusos que quizás no hayas oído antes.
Síndrome de capgras
El sello del síndrome de capgras es la creencia delirante de que alguien cercano a ti – una pareja, un familiar, un mejor amigo, e incluso una mascota – ha sido reemplazado por un impostor idéntico. El paciente puede fijarse en una o muchas personas, y puede hacer episodios temporales crónicos o agudos.
El estudio de un caso de 1991 describe a una mujer de 74 años que había sido dada de alta en un hospital después de su primera admisión psiquiátrica, y había llegado a otra instalación para una segunda opinión: “En el momento de su admisión a principios de ese año, ella había recibido un diagnóstico de psicosis atípica por su creencia de que su esposo había sido reemplazado por otro hombre”, escribieron los investigadores. “Ella rechazaba dormir con el impostor, cerraba su habitación de noche, le pidió a su hijo una pistola, y finalmente luchó con la policía cuando se trataba de hospitalizarla… Ella fácilmente reconoció otros miembros de la familia y solo no reconoció a su esposo”.
Los doctores han usado muchos casos documentados de Capgras para explorar las posibles causas y tratamientos de este delirio, pero no han llegado a respuestas sólidas. Algunos investigadores dicen que se debe a un fallo de procesos simples de reconocimiento en el cerebro, con el daño por algún golpe, sobredosis de droga, u otros factores externos.
La condición puede ocurrir al mismo tiempo que otras enfermedades mentales, más comúnmente la esquizofrenia, y a menudo aparece en pacientes con una enfermedad neurodegenerativa.
Autofagia
Como si el canibalismo ya no fuese horrible, la autofagia lleva las cosas aún más allá: la gente con este trastorno se come su propia carne. La condición podría ser clasificada como un problema general de control de impulso. Esta clase de enfermedad involucra el fallo para aguantarse la urgencia de llevar a cabo un acto que es perjudicial para uno mismo o para los demás.
Un ejemplo de autofagia es una mujer de 66 años quien fue admitida en una instalación, quien gradualmente se deterioró a sí misma por mutilación.
“El paciente… ha estado mutilando sus dedos por 6 años”, escribieron los doctores. “Primero comenzó comiéndose las uñas y continuó como una severa mutilación de sus dedos (mordiéndoselos), resultando en la perdida de las falanges terminales de todos los dedos en ambas manos”.
Este paciente en particular se benefició de una combinación de tratamiento antipsicótico y antidepresivo, pero no todos los casos de autofagia son iguales. Algunas veces el comportamiento parece ser un síntoma de algo más, como la condición genética del síndrome de Lesch-Nyhan.
Sin embargo, un estudio examinó la ocurrencia de la autofagia en cinco pacientes que habían sufrido de lesión espinal traumática. Los resultados fueron desconcertantes: “Todos los pacientes eran inteligentes, dispuestos a discutir sus problemas, y capaces de identificar condiciones de estrés y aislamiento en sus vidas”, escribieron los investigadores. Pero no pudieron establecer un enlace entre el dolor de la lesión de los pacientes y su autofagia, y tratamientos con drogas, asesoramiento, y terapia comportamental solo produjeron resultados mixtos.
Síndrome de Cotard
También llamado delirio de negación, el síndrome de Cotard es una condición rara en el cual una persona cree que está muerta. En algunas variaciones las personas mantienen el engaño de que no existen, o que han perdido su sangre u órganos.
“Empecé a creer que estaba en la perdición, o en alguna clase de infierno”, escribió Esme Weijun Wang en un ensayo acerca de su experiencia con el síndrome de Cotard. “Estaba intentando de averiguar que había hecho mal, que me había condenado a esta vida que parecía mi vida real antes de morir pero no era real – ese era el tormento”.
La neuróloga francesa Jules Cotard trató al primer paciente registrado. Mademoiselle X, como ella la nombró, no veía la gracia de comer ya que estaba perdiendo todos sus órganos. Murió de hambre.
Las posibles causas del síndrome de Cotard varían ampliamente, desde una reacción adversa a la droga hasta fallos neurales en la amígdala. Ha habido muchos tratados exitosamente a través de la farmacología y terapias electroconvulsivas.
Trastorno de identidad de la integridad corporal
El síntoma prominente del trastorno de identidad de la integridad corporal o BIID (por sus siglas en inglés) es una enfermedad psiquiátrica que provoca en el individuo afectado un irresistible deseo por amputarse una o más extremidades sanas del cuerpo.
En un caso reciente, una mujer llamada Jewel Shuping se cegó intencionalmente a sí misma.
“No creo estar loca, creo tener un trastorno”, ella explicó en una entrevista. “El BIID significa que tienes la necesidad de ser discapacitado de alguna forma. En mi caso, necesitaba ser ciega”.
Expertos han descrito este intenso compromiso a discapacitarse a uno mismo un “desajuste entre la imagen mental corporal y el cuerpo físico”. Investigadores dicen que un “conocimiento y respeto por los individuos que sufren de BIID” es el primer paso para comenzar tratamientos exitosos.
Como con otros trastornos, los doctores no están seguros de lo que causa el BIID o por qué se manifiesta de diferentes maneras para diferentes personas.
¿Qué tan extraños o raros te parecen estos trastornos mentales? ¿Conoces alguna otra historia?
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