Los psicópatas están en todo el mundo, no hay ciudad que no se salve. Pero no tengas miedo, algunos de ellos pueden ser serviciales, solidarios, e incluso bastante agradables, según lo indica un nuevo estudio. Un grupo de psicólogos han descrito dos tipos de psicópatas – primarios y secundarios – y resulta que uno de ellos es considerado ser mucho más amigable que el otro.
Se conoce a los psicópatas primarios por tener dominancia intrépida. “La gente con este rasgo quieren las cosas a su manera, no tienen miedo de las consecuencias de sus actos, y pueden resistir muy bien al estrés”, dijo Nora Schütte, una investigadora en la Universidad de Bonn y coautora del estudio.
Los psicópatas secundarios tienen lo que se conoce como impulsividad egocéntrica. “Las personas con grandes valores aquí, carecen de un “freno” interno”, dijo Schütte. “Su autocontrol es débil, y por lo tanto no tienen ninguna consideración hacia los demás”. Aunque puede ser un poco difícil concluir con estas dos descripciones, resulta que aquellos en el lugar de trabajo tienden a ser más lo primero que lo segundo.
De hecho, a pesar de que son propensos a tomar muchos riesgos, los psicópatas primarios pueden permanecer completamente desapercibidos en su lugar de trabajo – lo que nos dice que ellos también tienen habilidades sociales efectivas. Los psicópatas secundarios, por otro lado, muchas veces fueron considerados poco serviciales, destructivos, y generalmente malos trabajadores, incluso si sus habilidades sociales eran de alguna forma aceptables.
Como se dijo anteriormente, muchas personas son psicópatas a un cierto grado, justo como pueden ser narcisistas o maquiavélicos (manipuladores). Si eres capaz de “apagar” tu empatía y remordimiento, eres bastante anti-autoritario, eres audaz socialmente, y bastante impulsivo, entonces de alguna forma eres psicópata.
Los psicópatas pueden estar del lado bueno o del lado malo, de lo sano o insano, objetable o amigable. Algunas personas son más psicópatas que otros; los psicópatas desinhibidos pueden ser creadores de problemas, genios creativos, o dramáticos. Estudios anteriores han encontrado que los psicópatas maquiavélicos tienden a ser muy exitosos en sus carreras.
Consciente de dichos matices, este equipo de investigadores quiso subdividir a los psicópatas en múltiples categorías distintas. Reconocieron que la gente en varios puntos del espectro de psicopatía tendría un efecto diferente en el entorno de trabajo.
Entrevistaron a 161 personas, a quienes se les pidió proveer detalles de sus habilidades sociales, sus personalidades, y su rendimiento en el trabajo. Luego se evaluó el rendimiento de cada participante.
Cualquier tipo de psicópata sin ninguna habilidad social promueve la antipatía y la desconfianza. Sin embargo, aquellos que no se preocupan de las consecuencias de sus actos – los primarios – son vistos con un miembro bienvenido al lugar de trabajo, en tanto sean capaces de hacer que los demás alrededor de estos se sientan en comodidad. Como resulta, su determinación para hacer las cosas a su manera y su habilidad para resistir a la presión los hace trabajadores efectivos.
El estudio también encontró que la fuerte tendencia de los psicópatas secundarios de ser altamente desconsiderados y anti-autoritarios significa que no pueden cubrir su egoísmo, incluso con un buen nivel de habilidades sociales. Así que la lección aquí parece ser que ser intrépido, sin ser egoísta abiertamente, es la manera de proceder en el lugar de trabajo – en caso de que, claro, seas un psicópata. Entonces, ser psicópata es algo bueno, ¿qué te parece?
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