Quizás el mayor error acerca de la depresión es el pensar que es lo mismo que sentirse deprimido. En realidad, la depresión es un desorden de salud mental que persiste durante al menos dos semanas consecutivas. Esto interfiere de forma significativa en el funcionamiento normal de la persona, dejando evidencia tangible tanto a nivel biológico como neurológico.
En una reciente charla Ted, la doctora Helen Farrel, instructora en psiquiatría en la Escuela de Medicina de Harvard y psiquiatra del equipo del Beth Israel Deaconess Medical Center en Boston, explica cómo está generalizada la depresión.
La depresión es la principal causa de discapacidad en el mundo, y en Estados Unidos se estima que afecta al 10% de los adultos. Los síntomas de la depresión varían desde el bajo estado de ánimo y la pérdida de interés en las cosas que antes le encantaban a la persona, hasta cambios en el apetito y sentimiento de inutilidad. Aunque los expertos no tienen claro qué causa la depresión, sospechan que es una mezcla de factores ambientales y genéticos.
Los doctores han notado que la depresión no es solamente una manifestación mental, si no que también provoca cambios en el cerebro y en el cuerpo. Por ejemplo, los pacientes con depresión cuentan, a menudo, con lóbulos frontales más pequeños y con cambios en el volumen del hipocampo cerebral. Adicionalmente, a nivel molecular, los doctores creen que los pacientes con depresión podrían tener un agotamiento o secreción anormal de neurotransmisores asociados con el humor, como la serotonina, la norepinefrina y la dopamina.
Deja una respuesta