Buscar trabajo es una quimera para muchos a pesar de que el tejido empresarial esté teniendo problemas para contrataciones y búsqueda de talento especializado. Antes en periódicos, hoy en redes sociales y plataformas, muchas personas se encuentran hoy en día desempleadas y solamente acceder a una entrevista de trabajo implica un tiempo que, en ocasiones, se eleva a varios meses de intentos.
Desde la lectura del libro El arte de reorientar una carrera con propósito (LID), escrito por Camino Rodríguez, hemos encontrado un método muy bueno y muy optimizado. La clave de todo es tomarse una búsqueda de trabajo como si fuera un trabajo en sí mismo, con todo lo que ello implica. El comportamiento es similar con la diferencia de que no te pagan por ello.
Sin embargo, la situación pueden cambiar siguiendo las recomendaciones extraídas del contenido de esta obra.
Tabla de Contenidos
Buscar trabajo es mantener una rutina: sé consistente cada día
Si el trabajo es rutina, buscar trabajo, también. Es por ello que en primer haya que definir unos horarios para ponerse con esta tarea. Cada cual debe fijarse una agenda y ver los momentos del día en el que se es más eficiente. A partir de aquí, hay que establecer un horario fijo: de principio a fin. Buscar trabajo con este inicio de la metodología ayudará a separar momentos. Al final de cada jornada, la persona puede dedicarse a otros temas más personales.
Hay que ser estrictos con los tiempos a menos que surja una oportunidad inesperada. Momentos como un evento de networking, ferias de empleo o una entrevista de trabajo merecen romper con esta rutina. Eso no quita para que haya una organización de actividades. En aras de fijar prioridades, hay que hacer listas diarias y semanales que incluyan búsqueda de ofertas, actualización de currículum, formaciones y networking.
Paralelamente a la creación de una agenda y horarios, es importante crear un espacio de trabajo a la hora de buscar trabajo. Tener un espacio exclusivo para trabajar en tu búsqueda de empleo ayuda a concentrarte. Este debe ser ordenado, tranquilo y libre de distracciones. Y sé ordenado: asegúrate de que tu espacio de trabajo esté bien equipado con lo necesario, como tu ordenador y acceso a internet.
Siguiendo la esencia de que buscar un trabajo es un trabajo, establece metas claras. En este proyecto, hay que definir objetivos semanales, como aplicar a un número específico de empleos o asistir a eventos. Tener metas te proporcionará dirección y te permitirá medir tu progreso.
Finalmente, hay que evaluar cada progreso de forma semanal. Es menester revisar lo que ha funcionado y lo que no. Si ciertas actividades no están dando resultado, realiza ajustes y dale tiempo a esos cambios para que muestren su efectividad.
Fija límites para evitar que buscar trabajo te consuma por dentro y por fuera
Establecer límites claros ayudará a mantener el foco y proteger tu tiempo y energía. Estas son algunas sugerencias sobre cómo hacerlo:
Comunica tu situación a tu entorno
Explícales tu compromiso: Informa a tu familia y amigos que, aunque estés en casa, estás comprometido con una tarea importante. Hazles saber que no estás en un periodo de tiempo libre, sino trabajando activamente en tu futuro.
Define horarios de disponibilidad: Deja claro cuándo estarás disponible para actividades sociales o tareas domésticas. Esto permitirá que tanto ellos como tú respeten esos horarios.
Reduce las interrupciones
Protege tu tiempo: Asegúrate de que las interrupciones sean mínimas durante tus horas de trabajo. Coloca señales si es necesario para indicar que estás enfocado en tu búsqueda de empleo.
Maneja las expectativas externas
Aprende a decir no: No dudes en rechazar invitaciones o propuestas que interfieran con tu búsqueda de empleo. Decir no es fundamental para mantener tus límites y prioridades en orden.
Autodisciplina y autogestión
Respeta tus propios límites: Así como estableces límites con los demás, respétalos tú mismo. Evita desviarte de tu planificación o dedicar demasiado tiempo a actividades que consumen tu energía, como las redes sociales o la televisión.
No te olvides de tu salud
El proceso de búsqueda de empleo puede ser estresante, por lo que es crucial velar por la salud física y mental, lo cual incluye hacer ejercicio, comer sano, descansar o disfrutar de los momentos de ocio. Por ello:
Mantén una rutina de ejercicio
Realiza actividad física regularmente: El ejercicio no solo mejora tu salud física, sino que también es beneficioso para tu bienestar mental. Elige actividades que disfrutes, como caminar, correr o yoga.
Beneficios del ejercicio: El ejercicio libera endorfinas, conocidas como las hormonas de la felicidad, que pueden ayudarte a reducir el estrés y la ansiedad.
Procura una alimentación equilibrada
Come de forma saludable: Una dieta rica en frutas, verduras y proteínas te proporcionará la energía necesaria para mantenerte enfocado.
Evita estimulantes en exceso: Reducir el consumo de cafeína y azúcar te ayudará a mantener niveles de energía más estables.
Descansa lo suficiente
Duerme bien: El descanso es fundamental para la recuperación física y mental. Asegúrate de dormir lo necesario para poder mantener la concentración y claridad durante el día.
Establece una rutina de sueño: Tener horarios regulares para dormir mejorará la calidad de tu descanso.
Cuida tu bienestar mental
Practica la relajación: La meditación, el mindfulness y la respiración profunda pueden ayudarte a gestionar el estrés y mantener una actitud positiva.
Busca apoyo: Hablar con amigos, familiares o incluso con un profesional puede ser muy útil para gestionar tus emociones.
Date tiempo para disfrutar
Encuentra tiempo para el ocio: Haz pausas regulares durante tu búsqueda de empleo y dedica tiempo a actividades que disfrutes.
Evita el aislamiento: Mantén contacto social y programa actividades con amigos para mantener tu bienestar emocional.
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