Si tienes dolor en tu vulva, no estás sola. Cerca del 16% de las mujeres tendrán dolor vulvar por un tiempo mayor a 3 meses. No son neuróticas ni promiscuas. Es muy posible que estén sufriendo de una condición llamada vulvodinia.
La condición ocurre en mujeres de todas las edades y etnias, independientemente de la educación, tipo de piel, inclinación sexual o estatus marital.
El dolor puede ser muy fuerte y comúnmente se describe como una puñalada, como si ardiera o como una cuchillada.
Puede ocurrir solo cuando la vulva es provocada, como cuando es tocada por la ropa o por intento de penetración, o puede ser constante.
Sin ser sorpresa, la vulvodinia puede impactar severamente la calidad de vida de una mujer.
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La vulvodinia y sus costos
Cerca de la mitad de nuestra especie tiene una vulva, aunque sorprendentemente algunas no saben qué es, o donde está.
La vulva se refiere a los genitales externos de las mujeres: el clítoris, el labio, la abertura vaginal y las glándulas vestibulares, el cual provee de lubricante natural a la vagina.
Tiene un suministro de nervios especializados y otorga placer cuando se estimula correctamente.
La vulva no se extiende a la propia vagina, la cual está adentro, no afuera.

El “dinia” al final de la palabra se refiere al dolor. Entonces vulvodinia significa literalmente “dolor de vulva”. Si tienes dolor en tu vulva donde sea desde tu clítoris hasta tu ano o labios, y no tienes una lesión clara o una infección, entonces tienes vulvodinia.
Tres de cada 20 mujeres desarrollaran vulvodinia en algún momento y el costo puede ser profundo. Las afectadas a menudo luchan para usar ropa interior, sentarse o usar tampones.
Las mujeres con vulvodinia a menudo sufren durante el sexo. Algunas buscan terminar sus relaciones cuando el dolor se vuelve inaguantable.
Pueden sentir tanta vergüenza por su condición que no lo mencionan a su pareja o no les dicen que es la razón por la que se quieren separar.
Y cuando hablamos de costos económicos, extrapolando de un estudio en Estados Unidos, la vulvodinia le cuesta a Australia más de 2 billones de dólares por año (para tener un estimado).
Desafortunadamente, no sabemos las causas de la vulvodinia, aunque sí sabemos algunas cosas que NO la causan. Se solía considerar como resultado de una mujer que tiene muchas parejas sexuales, por ejemplo, pero ahora sabemos que no existe relación alguna entre las dos.
Casos sospechosos
Las mujeres con vulvodinia son sensibles en todas las partes de su cuerpo, no solo en la vulva. Comúnmente tienen otras condiciones dolorosas como el síndrome del intestino irritable. Esto implica cambios en sus centros de procesamiento de información del cerebro que produce el dolor en estas mujeres.
Las mujeres con vulvodinia también tienen niveles mayores de marcadores inflamatorios en su sangre – parte de una respuesta inmune – que aquellas no afectadas.
Ellas suelen reportar repetidas infecciones por cándida y haber tenido una enfermedad transmitida sexualmente. Esto hace que algunos investigadores piensen que existe una posible asociación entre infecciones previas y la inflamación.

La inflamación puede inducir el crecimiento del nervio en la región de la vulva – lo que también podría explicar porque la vulva se vuelve hipersensible en la vulvodinia. Pero las chicas pueden tener vulvodinia antes de que reporten candidiasis, así que no es tan simple como eso.
Los factores psicológicos tienen su parte en el juego, así como lo tienen en cualquier estado de dolor. Pero es difícil saber si estos problemas vinieron antes o después del dolor. La disfunción sexual asociada con la vulvodinia puede incrementar la depresión, el cual puede llevar a más disfunción sexual, por ejemplo. Sin embargo, algunas mujeres reportan síntomas de vulvodinia por primera vez seguido de un trauma psicológico, como la muerte de un pariente, pareja o amigo.
Muchas mujeres desarrollan vulvodinia durante la menopausia, lo cual indica que las hormonas pueden jugar un rol. También puede haber un componente genético ya que las mujeres suelen desarrollar la condición si alguien en su familia la tiene, o la ha tenido.
¿Qué debería hacer si tengo dolor vulvar?
Si sospechas que tienes vulvodinia, tu primer paso debería ser ver a tu doctor y pedirle que te refiera a un ginecólogo o a un especialista vulvar con un interés de tratar condiciones de dolor.

Las investigaciones para entender la vulvodinia están muy por detrás de otras condiciones de dolor crónico como el dolor de espalda, lo que significa que hay pocas opciones de tratamiento disponibles. Pero tu especialista te ayudará a decidir en algunos tratamientos que se adapten a ti.
Un plan de tratamiento a menudo incluirá medicamentos, consejos en el manejo de estrategias y referencias a otros profesionales como fisioterapistas o psicólogos.
Los tratamientos como el masaje de la musculatura del piso de la pelvis y entrenamiento para ayudar a reducir la tensión en el área también podrían ayudar.
¿Cómo puedo reducir el dolor vulvar?
Anecdóticamente, conocemos cosas que puedes hacer en casa para reducir el dolor vulvar.
Muchas mujeres encuentran alivio usando compresas frías o un ventilador que dé directamente a su vulva. Puedes evitar usar jabones o gel de baño para limpiar tu vulva; puedes usar solamente agua.
Asegúrate de estar bien lubricada durante el sexo, pero algunos lubricantes comerciales podrían agravar los síntomas.
Alternativas naturales son el aceite de almendra y el aceite de coco. Con estas recomendaciones podrías ayudarte a ti misma a aliviar el dolor vulvar o la vulvudinia con un tratamiento natural.
Fuente:
Puedes encontrar los síntomas aquí.
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