Los genes definen cerca del 50% de nuestra felicidad, pero una buena parte del resto depende de nuestro entorno y estilo de vida.
Los científicos ahora saben que tus genes pueden jugar un rol al determinar tu felicidad; algunas personas están naturalmente predispuestas a problemas de salud mental como la depresión y la ansiedad, mientras otros parecen estar más protegidos. Pero los genes solo constituyen cerca del 50% de lo que define la felicidad. Las circunstancias, el entorno, el estilo de vida, tu comportamiento y la manera en que procesas los pensamientos constituyen el resto. Por suerte, tenemos el control sobre una gran parte de estos.
A parte de comer, dormir, y el sexo – los requerimientos fundacionales básicos para la supervivencia y la felicidad – a menudo anhelamos un sentido de satisfacción más grande e intangible. Los humanos han tratado de definir la felicidad por generaciones, y generalmente difiere entre los individuos dependiendo de su sociedad, cultura, filosofía, y/o religión. Pero para ser más breves, vamos a enfocarnos en lo que ha dicho recientemente la ciencia psicológica acerca de las mejores formas de encontrar la felicidad.
Conexión, dominancia, autonomía
[no_toc]Después de las cosas básicas como comer y dormir, algunos psicólogos creen que existen otros tres requerimientos para la felicidad. Raj Raghunathan, profesor de mercadeo en la Universidad de Texas y autor del libro Si eres inteligente, ¿Por qué no eres feliz? Las describió para Psicología Hoy.
El nota que lo primero es la conexión social, o un “sentido de pertenencia”. La sociedad americana a menudo favorece el individualismo y la independencia – los cuales son importantes para la identidad y la autoestima – pero al final del día, tener algún compañero o amigo y familia con quien compartir tu vida puede ser la diferencia entre sentirse realizado e infeliz. Efectivamente, estudios han mostrado que la soledad puede ser tan perjudicial a tu salud como una enfermedad física.
Luego, debemos ser capaces de sentir que somos buenos para lo que sea que hayamos escogido dominar en la vida. Si escoges ser un doctor, esperas que todo tu entrenamiento y trabajo de como resultado que seas un excelente doctor. Tener un sentido de dominancia en nuestras vidas en importante. Como tercer punto, la autonomía y la libertad – la sensación de tener el control sobre tu propia vida – son requerimientos para la felicidad.
Pero tener estos requerimientos solo te hará feliz si los adoptas de la manera correcta, afirma Raghunathan. Puedes adoptar la pertenencia por dos vías: la necesidad de amar o ser amado – puedes dominar tu arte buscando la superioridad o persiguiendo tu pasión – y lograr la autonomía, a través de un control de poder externo o interno. Para cada requerimiento, la última ruta parece ser la única a la felicidad.
“Aunque la necesidad de ser amado, la necesidad de superioridad, y la necesidad por el control externo pueden aumentar los niveles de felicidad a corto plazo, pero tienden a disminuir a largo plazo”, escribe Raghunathan. “En contraste, la necesidad de amar, perseguir tu pasión, y la necesidad del control interno tienen un potencial mucho mayor para aumentar no solo la felicidad de corto plazo, sino también a largo plazo. Además tienen el potencial de aumentar la felicidad de los que nos rodean”.
No te compares con los demás
Probablemente queramos dominar algún arte, o al menos lograr algunos objetivos. Pero cuando estamos motivados por cosas indebidas y logramos dichos objetivos, algunas veces no sentimos ninguna felicidad. Un estudio ha mostrado que los grandes eventos o logros, como mudarse a una nueva ciudad o país, contribuye cerca del 40% de felicidad durante ese tiempo, pero ese efecto suele desaparecer en unos pocos meses. Por eso enfocarse en hacer las cosas que naturalmente disfrutas – en lugar de compararte con los demás con la esperanza de ser superior o trabajar hacia un objetivo solo por los resultados – traerá más felicidad a largo plazo.
“Cuando no necesitas compararte con los demás, gravitas hacia cosas que instintivamente disfrutas hacer, y en las que eres bueno”, dijo Raghunathan en una entrevista.
Fíngelo hasta que lo logres
Algunas veces la felicidad verdaderamente es una decisión: decidir estar feliz en lugar de estar triste puede mejorar tu humor, y de hecho hace que la lucha sea más fácil. Un estudio mostró que simplemente sonreír o pararse derecho puede tener un impacto significante en tu humor, confianza, y perspectiva.
Lo mismo se puede aplicar al trabajo. Con la dominancia del arte, como se mencionó anteriormente, viene la necesidad de desafíos continuos. Decidir simplemente ir por el siguiente desafío independientemente de si fallaras o no, y “simularlo” sin temor, traerá sorpresas placenteras de éxito, nuevo aprendizaje, y la satisfacción de superar un nuevo desafío.
Valora más el tiempo que el dinero
El dinero puede traer felicidad hasta un punto al contribuir con la autonomía, pero al final del día, el tiempo termina siendo más importante que los dólares, euros, pesos o la moneda que utilices. Un estudio publicado este año encontró que las personas que valoran más su tiempo mantenían más la felicidad que aquellos quienes ponen más atención en hacer dinero. Después de un cierto punto, todos necesitamos usar esas horas extras de trabajo para pasar tiempo con familia y amigos, o en alguna pasión que disfrutemos.
Desconéctate un poco
Algo por lo que nuestros ancestros no se tenían que preocupar era la necesidad de desconectarse de la tecnología y de la comunicación constante, pero podría ser otro requerimiento para la felicidad. Un estudio del 2015 encontró que simplemente cerrar sesión en Facebook por una semana aumentaba los niveles de felicidad, reducía el estrés, mejoraba la habilidad de sentirse presente en el momento. Desconectarse de las redes sociales y no mirar por algunas horas el Whatsapp también te podrá ayudar a que no te compares con los demás.
Recuerda momentos felices
Concentrarte en cosas que disfrutas en lugar de la fama o el dinero va de la mano con la idea de desarrollar fuerza interior y carácter en lugar de buscar la validación externa. Un estudio reciente de la Universidad de Liverpool sugiere que podemos construir esta fuerza interior al fomentar pensamientos y sentimientos positivos, los cuales sucesivamente desarrollan resistencia contra trastornos psicológicos. Una manera simple de mejorar tu pensamiento positivo cuando normalmente eres una persona negativa es recordando momentos felices, dicen los investigadores.
Fuentes:
PILAR GARCIA GARCIA dice
ME AYUDAS MUCHO, ES EL MEJOR ARTICULO QUE ENCONTRE.
Omar Morante dice
Efectivamente son maneras simples pero que aveces no tomamos en cuenta para ser más felices. Gracias por tu comentario, Pilar! Saludos