Seguro que en algún momento de tu vida has oído hablar de la famosa «zona de confort». Se trata de un momento o una situación vital muy frecuentada por cada porque es ahí donde las personas se sienten cómodas tanto a nivel personal como desde el punto de vista profesional. Sin duda, esto puede representar una sensación de felicidad, pero hay algunos expertos, sobre todo aquellos que hablan de plano profesional, que mantienen que esta zona de confort nos impide avanzar.
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¿Cómo detectar que estamos instalados en nuestra zona de confort?
Ahora bien, ¿cuándo podemos decir que estamos metidos en nuestra zona de confort? Los especialistas consideran que estamos en la zona de confort cuando nos decantamos por la rutina tanto en comportamientos como hábitos o elecciones. Según el estudio Jobstacles, de la red social LinkedIn, el 70% de los trabajadores españoles afirma que tener un trabajo indefinido es suficiente para que no busquen nuevas oportunidades laborales.
En este sentido, las personas que en algún momento se han planteado salir de la zona de confort no lo hacen porque tienen miedo al cambio. Sin embargo, esto puede conducir a una sensación de vacío e insatisfacción, ya sea a nivel personal o profesional.
Sal de tu zona de confort y vence al miedo con estos 9 consejos
Para ayudarte, Hotmart, empresa global de tecnología y líder en productos digitales, te revela algunos consejos que puedes aplicar en tu día a día para salir de tu zona de confort:
- Descubre tu potencial – Antes de emprender cualquier acción, es necesario realizar un análisis de nuestro día a día. Empieza por responder a algunas preguntas, por ejemplo: ¿Estoy satisfecho con mi estado actual? ¿Qué sueños he dejado de lado a lo largo de mi vida? ¿Cuáles son mis aficiones? ¿Qué habilidades he desarrollado hasta ahora? La lista puede variar según el perfil de cada persona. Sin embargo, responder a estas preguntas con sinceridad es el primer paso para salir de tu zona de confort. Además, las respuestas que puedes dar hoy seguramente sean diferentes de las que darás si haces el mismo ejercicio en el futuro. Esto se debe a que desarrollamos diferentes habilidades en función de los esfuerzos que realizamos en nuestra vida.
- Aprende a adaptarte – Mejorar nuestra capacidad de adaptación es una característica esencial de una persona que se conoce a sí misma y está preparada para afrontar situaciones inesperadas. En general, no tenemos ningún control sobre las personas que nos rodean, ya que son libres de actuar y pensar como quieran. Así que no seas tan radical. Intenta adaptarte a los escenarios que se presentan y, más que eso, intenta aprender de las nuevas situaciones impuestas.
- Estudia más sobre diferentes temas – Invierte en conocimientos que puedan aportar valor a tu vida profesional, pero no olvides realizar también actividades de interés personal. Por ambas vías, conseguirás ser una persona más equilibrada y realizada emocionalmente.
- Intenta eliminar tus miedos – Sentir miedo es natural y sirve para protegerte del peligro. Sin embargo, el miedo en exceso es perjudicial para tu desarrollo personal, ya que dificulta las relaciones y la realización de nuevas experiencias en tu rutina. Para superar el miedo es necesario enfrentarse a lo que provoca este sentimiento. Una situación que dificulta el desempeño de los empresarios es la dificultad para hablar en público, y esta característica es fundamental en cualquier área. Por lo tanto, haz todo lo que puedas para desarrollar esta habilidad.
- Tener una buena red de contactos – Conocer gente nueva es una forma estupenda de salir de la zona de confort. Una simple charla mientras se toma un café puede conducir a una buena conexión profesional o incluso puede generar negocio. Así que no tengas miedo de participar en eventos, sumar nuevos contactos y conocer otras realidades y opiniones
- Prueba algo nuevo cada día – Salir de la zona de confort es algo que requiere un esfuerzo diario para superar los obstáculos. En este sentido, intente vivir nuevas experiencias, por ejemplo, tomar una ruta diferente para ir al trabajo, planificar un viaje a un destino inusual, comer en restaurantes que no conozca. Estos pequeños cambios de hábitos suponen un gran progreso.
- Haz actividades independientes – Seguramente has dejado de ir de excursión o de ir al cine por no tener compañía. Intenta hacer también algunas actividades a solas. Verás que este tiempo es ideal para el autoconocimiento.
- Comparte tu opinión y acepta los comentarios – Si no sueles compartir tu opinión y expresar tus sentimientos, es hora de empezar a hacerlo. Estas sencillas actividades son fundamentales para salir de la zona de confort, ya que requieren una cierta dosis de valor. Por otro lado, también debes estar preparado para escuchar lo que los demás tienen que decir sobre ti . Analiza todo lo que se ha dicho y piensa en lo que puedes mejorar.
- Crear objetivos – Debes crear objetivos para salir de tu zona de confort. Para ello, haz una lista de las actividades que quieres realizar y fija un plazo para cada una de ellas. Sólo hay que tener cuidado de no fijarse algo que sea inalcanzable, porque obstaculizará tu desarrollo personal y profesional.
En definitiva, existen numerosas formas de salir de tu zona de confort y con estos consejos puedes descubrir cuál es la que mejor te funciona. ¿Has diseñado ya tu propio plan?
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