¿Qué es la empresa? Definición, características y tipos
Tabla de Contenidos
Definición principal
«Una empresa es una organización o entidad emprendedora dedicada a actividades comerciales, industriales o profesionales, donde se intercambias bienes y servicios por otros, o por dinero. Cada empresa o negocio requiere de alguna forma de inversión, así como de clientes a los que se les pueda vender el producto que se ofrece, de una forma coherente y consistente para obtener un beneficio.»
¿Cuáles son los diferentes tipos de empresa?
Debemos acordar el tipo de empresa con la que vamos a trabajar, pensando en las necesidades de nuestra idea
Al menos hay seis tipos diferentes de empresa, por lo que debes leerlos detenidamente antes de elegir una estructura concreta:
1. Empresa individual
La empresa individual es el tipo de comercio más antiguo, pero también el más simple y el más común que te puedas encontrar. La característica principal está en su nombre – significa que tú eres el único responsable de todo lo que hace la empresa, es decir, eres el propietario. Este es el tipo de empresa que utilizan las pequeñas tiendas y negocios para proporcionar sus servicios. Son, por ejemplo, farmacias, peluquerías o fotógrafos, entre otros.
Cuando empiezas tu empresa, lo más común es que utilices tu propio dinero para financiarla. Sin embargo, a medida que empieces a crecer, necesitarás encontrar a alguien que quiera invertir también en ese proyecto. Cuando esto sucede podrías querer o necesitar entrar en otro tipo de modelo empresarial:
2. Asociación
Una asociación está formada por dos o más personas, por lo que tanto los beneficios, como las deudas y decisiones relacionadas con la empresa, son compartidos por todos sus miembros. Esto es algo común en las prácticas que ofrecen servicios, como los psicólogos, contables, dentistas o médicos.
3. Compañía
Otro nombre con el que se conoce a la compañías con un gran número de propietarios es el de sociedad anónima, pero también puede contar con un número pequeño de inversores, conocidos entre ellos. Está formada por un número de personas que han puesto su dinero en conjunto para formar una sociedad de capital. A estas personas se les conoce comúnmente con el nombre de accionistas y, como el nombre sugiere, cada uno de ellos tiene una parte de la empresa y cada uno espera una parte de los beneficios.
Las sociedades anonimas pueden estar formadas por multitud de accionistas, todo el que decida comprar una parte, puede hacerlo
Cada accionista pone su dinero en la compañía, por lo que recibe una porción de la misma, equivalente a lo que él/ella ha invertido.
A pesar de que cada uno de los accionistas comparte una pieza de la compañía, para la ley es vista como una entidad legal – de la misma forma que una empresa individual – que está dividida en cada uno de los accionistas o miembros que la componen. Puede ser demandada, conseguir una ganancia o una pérdida, hacerse responsable de las acciones de los empleados y entrar en liquidación – el término utilizado para las empresas que van a la quiebra.
Sociedades de Responsabilidad Limitada
La mayor parte de empresas pequeñas son sociedades de responsabilidad limitada con las acciones que solo están disponibles en privado, por ejemplo, para los miembros de una familia. Las acciones no están disponibles para ser compradas públicamente por lo que no pueden ser negociadas por el mercado de valores.
Sociedades Anónimas
Ser una Sociedad Anónima (SA) es mucho más complejo, por lo que suelen formar parte de este tipo de empresa compañías más grandes. Para ser llamada una SA una compañía debe tener, a parte de otras cosas, más de uno director y un certificado de comercio de Companies House.
Las SAs pueden vender sus acciones en el mercado de valores a cualquiera que pueda comprarlas. A pesar de que es más fácil de conseguir dinero utilizando este método también significa que las cuentas de la empresa son de dominio público. Además, la compañía debe ser auditada y asegurarse de que la información esté disponible para Companies House. Por supuesto, las SAs pueden ser compradas por otros accionistas.
4. Franquicias
Una franquicia implica crear tu propia tienda, restaurante, etc, a partir de la utilización de un modelo de negocio que haya tenido éxito. Esencialmente, compras la franquicia y utilizas el nombre de la compañía que has adquirido. Por ejemplo la marca Subway – si encuentras una localización interesante, Subway te proporcionará sus productos y el uso de la marca registrada. Tú consigues dinero porque los clientes ya conocen la marca Subway; así que tienes una lista de clientes para comenzar.
Las franquicias de un producto exitoso pueden establecerse en cualquier localizacion siempre y cuando tengan posibilidad de venta
Las franquicias se establecen por un período de tiempo fijo – desde los 5 a los 35 años – y cubren ciertas localizaciones conocidas como un “territorio”. En compensación, tu tendrás que pagar una serie de tasas al franquiciador:
Derechos de autor por el uso de la marca registrada
Tasas por la formación y asesoramiento recibidos
Hay leyes específicas y complejas sobre los contratos de franquicia por lo que entrar a formar parte de una de ellas debe ser pensado con detenimiento y con mucho cuidado.
5. Cooperativas de Trabajadores
Este tipo de negocio es una forma totalmente igualitaria, formada para reunir las necesidades mutuas de los trabajadores. Cada persona – desde el director general hasta el asistente de la tienda – es igual de importante. Todas las decisiones son tomadas democráticamente y cualquier beneficio es compartido de forma igualitaria o reinvertido en la empresa. Las cooperativas siguen siete principios:
Adhesión voluntaria y abierta
Control democrático
Participación económica de los miembros (interés financiero)
Autonomía e independencia
Educación, formación e información
Cooperación entre cooperativas
Preocupación por la comunidad
6. Asociaciones de Responsabilidad Limitada
Son una nueva forma de empresa, desarrollada desde el año 2001. Tienen la finalidad de beneficiar a las asociaciones de profesionales, como abogados, contables y similares, que están acotadas de formar sociedades de responsabilidad limitada debido a las restricciones de sus organismos profesionales. En gran parte operan de la misma forma que una compañía de responsabilidad limitada, pero permiten que los miembros limiten sus responsabilidades personales si algo está yendo mal en la empresa.
Eligiendo la estructura
Cuando decides una estructura para tu empresa, debes elegir la que se adapte mejor a las necesidades de tu negocio. Además, debes tener en cuenta que cada uno de los diferentes tipos tiene sus ventajas y desventajas. Elegir tu estructura empresarial es una decisión importante que puede determinar las licencias que tú necesites en un futuro para operar. Por esto, debes investigar cada opción de manera cuidadosa y en detalle.
Elegir la estructura de la empresa es la parte mas importante, marca el inicio del proyecto
Es importante saber que puedes cambiar la estructura de tu empresa a lo largo de la vida de la misma. Por lo que a medida que crezca y se expanda, podrás decidir cambiarla o reestructurarla.
De todas formas, ten en cuenta que obtener consejo profesional y legal puede ayudarte a comprender cuáles son las circunstancias de tu caso en particular. Habla con un contable o abogado para decidir el tipo de estructura que más te conviene. Es importante dejar establecidos todos estos pasos antes de proceder al registro de tu empresa.
La empresa es una organización o entidad dedicada a actividades profesionales, donde se intercambia un bienes y servicios por otros, o por dinero.
Hay tipos muy diferentes de empresas, por lo que su clasificación es muy amplia y variada:
Empresa individual. La característica principal es que tú eres el único responsable de todo lo que hace la empresa, es decir, eres el propietario. Este tipo de empresa es elegido por los pequeños negocios.
Asociación. A diferencia de la anterior está formada por dos o más personas que comparten beneficios, deudas y responsabilidades
Compañía. Está formada por un grupo de personas, llamadas accionistas, que han puesto su dinero en común para fundarla. Hay dos tipos de compañías. Las Sociedades de Responsabilidad Limitada, caracterizadas por ser empresas pequeñas donde sus accionistas se conocen. Y, Asociaciones Anónimas, grandes empresas formadas por más de un director, donde cualquier accionista puede comprar una parte de la misma.
Franquicias. Un modelo de negocio que ha tenido éxito como Subway, es comprado por otra persona que quiere abrir una tienda. De esta forma, Subway le proporciona los productos y el nuevo emprendedor tiene que pagar unas tasas conforme está utilizando esa marca registrada y ha sido formado de acuerdo a su política.
Cooperativas de trabajadores. Es un negocio igualitario, donde tiene el mismo valor el director que el asistente de tienda. Se centra en satisfacer las necesidades compartidas por los trabajadores.
Asociaciones de Responsabilidad Limitada. Nacen en 2001 para beneficiar a las sociedades de profesionales. Se diferencian de las Sociedades de Responsabilidad Limitada en que permiten que sus trabajadores se desentiendan de la empresa cuando va mal.
Como has podido comprobar hay un sinfín de posibilidades. Para elegir la estructura adecuada de tu negocio es bueno que contactes con un profesional, un contable o un abogado, que te asesore de manera adecuada cuál es el modelo que mejor se adapta a tus necesidades.
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