¿Hay solución para las personas con enfermedades neurodegenerativas? Desde el punto de vista de la farmacología, hay evoluciones para muchas patologías, pero desgraciadamente en muchos casos no se trata de soluciones para la curación. Quizás conviene mirar hacia otro ámbito como las tecnologías. La campo de la neurotecnología integra el avance tecnológico en el estudio cerebral y poco a poco se están dejando ver desarrollos sorprendentes para beneficio de personas afectadas por enfermedades como la ELA. En estas líneas vamos a ahondar sobre esta especialidad y gracias al ejemplo de una empresa, conoceremos cómo puede afectar esta disciplina en la mejora de la salud.
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Neurotecnología, un potencial impacto sobre 1.000 millones de personas
En el mundo hay más de 1.000 millones de personas con algún tipo de capacidad especial, lo que supone aproximadamente un 15% de la población total. Se trata de cifras facilitadas por Baufest, una consultora internacional dedicada a proveer soluciones tecnológicas responsables. Muy comprometidos con este gran colectivo de la población mundial, la organización considera que la tecnología tiene un alto potencial para el estudio del cerebro. La tecnología juega un gran papel en cuanto a la tarea de mejorar la vida de estas personas, por ello, en Baufest, consultora internacional que desarrolla soluciones tecnológicas responsables, están muy comprometidos con el desarrollo de este campo.
En concreto, la entidad mantiene que la neurotecnología es una disciplina muy indicada para poder crear un futuro mejor para la sociedad. Existen muchas aplicaciones o soluciones digitales que no son todo lo accesibles que podrían llegar a ser, por lo que el desarrollo de este campo permitiría encontrar soluciones que incrementen las capacidades de las personas y mejoren sus vidas.
Para la accesibilidad cerebral
Desde esta perspectiva, cobran especial importancia todas las tecnologías ligadas con la neuroaccesbilidad, es decir, tecnologías que extraen información de cualquier canal posible de una persona, para poder establecer una interfaz de comunicación bidireccional. En este cruce entre la tecnología y accesibilidad lo que se busca es extraer las señales del cerebro (siempre de manera voluntaria) y usarlas para transmitir una orden a un ordenador, o eventualmente para controlar alguna herramienta o utilidad digital y cubrir las necesidades especiales de una persona en concreto, que pueden ser temporales o permanentes y afectar a multitud de factores físicos o mentales.
Según Baufest, las aplicaciones de esta tecnología engloban los desarrollos de distintas disciplinas, que van desde el desarrollo de interfaces cerebrales, pasando por el neurobusiness, el neuromarketing, la neuroergonomía y la neurorehabilitación. Asimismo, este campo también incluye prácticas de aumento de capacidades humanas tales como cyborgs, prótesis, exoesqueletos, dispositivos de asistencia, biochips y wearables, entre otros.
Brain Computer Interface
Dentro del gran paraguas de la neuroaccesibilidad, uno de los campos de trabajo que cobra especial relevancia es el de las interfaces cerebro-máquina (brain computer interface). Su objetivo es dar una alternativa de comunicación a personas afectadas por enfermedades neurodegenerativas, como es el caso de los pacientes con ELA (esclerosis lateral amiotrófica).
La idea, en este caso, es extraer señales que vienen del sistema nervioso central, procesarlas y utilizar la inteligencia artificial (IA) y aprendizaje automático (ML) para decodificar la información inherente que está detrás de esas señales. Estos desarrollos se pueden utilizar para mover una silla de ruedas, para usar el ratón de un ordenador, etc.
Los wearables son aliados de la neurotecnología
En el caso de la tecnología de asistencia (assistive technology), aún está en una etapa de investigación y desarrollo y queda bastante trabajo por hacer hasta que se pueda aplicar a cualquier persona; sin embargo, Baufest se muestra optimista con respecto a las previsiones de avances en este campo en los próximos años.
El objetivo de esta tecnología es resolver el problema de transmitir información para ejecutar un movimiento por un canal alternativo al que se encuentra dañado y que, por alguna razón, no se puede utilizar. Se busca obtener información del cerebro y el cuerpo de la persona, y de esta forma, crear un dispositivo que supla, ayude y aumente sus capacidades. Como en estos casos la decodificación de la señal es compleja, se trabaja con machine learning, inteligencia artificial y procesamiento de señales.
Por otro lado, otro campo dentro de las neurotecnologías son los dispositivos “wearables”, es decir, componentes o accesorios que se colocan en el cuerpo y que permiten la detección de señales, que obtienen información del cuerpo y que también pueden suponer un gran avance en el acceso a las herramientas digitales por parte de las personas con capacidades especiales. Esta tecnología cada vez cobra más relevancia ya que son dispositivos muy asequibles en cuanto al coste.
Bienestar digital, un delicado proceso
Baufest está muy comprometida con la búsqueda de soluciones que puedan resolver problemáticas concretas y ampliar los horizontes de las personas. Para la compañía, el diseño de una tecnología capaz de ayudar a las personas a mejorar su calidad de vida es esencial para el futuro de la sociedad.
La tecnología cambias nuestras vidas desde niños y cada vez antes, por ello Baufest ha configurado 5 principios para ayudar a hacer una tecnología más humana y respetuosa, estos principios giran en torno a los siguientes temas: su impacto, el rol, el posicionamiento, la función y los atributos. “La tecnología es neutra pero no su impacto, por ello, en Baufest tenemos interiorizado un proceso de reflexión sobre los proyectos, en el que analizamos qué impacto tendrá la solución en la vida de las personas antes de desarrollarlo. Nos proponemos mejorar la vida con tecnología dejando una huella en la sociedad, pero debemos tener cuidado ya que un mismo mecanismo puede utilizarse para avisar a una ambulancia, pero también para activar un explosivo”, explica Ángel Pérez Puletti, CEO de Baufest.
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