Aunque la miopía es uno de los problemas visuales más comunes, sigue siendo una de las que más dudas genera entre la población. Por ello, en este post desvelamos todo acerca de la enfermedad ocular y con estos datos sabrás si tienes o no miopía y lo que debes hacer al respecto.
Según datos de General Optica, líder en el cuidado de la salud visual y auditiva, cuatro de cada diez españoles son miopes, una cifra que no deja de aumentar, especialmente entre niños y jóvenes. Pero ¿sabemos realmente en qué consiste, por qué aparece o cómo podemos frenarla? Los expertos de la compañía lo explican con claridad, desmontando mitos y aportando pautas prácticas para cuidar la vista a cualquier edad.
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¿Qué es exactamente la miopía?
La miopía es un error de refracción del ojo que impide enfocar correctamente los objetos lejanos. Se produce cuando el globo ocular es demasiado alargado o cuando la córnea tiene una curvatura superior a la normal. En ambos casos, la luz se enfoca delante de la retina en lugar de sobre ella, lo que provoca una visión borrosa de los objetos lejanos. Así, una persona miope puede leer perfectamente un libro a corta distancia, pero tendrá dificultades para ver el nombre de una calle o una señal de tráfico.
Cómo saber si eres miope
Los síntomas más habituales suelen ser bastante reconocibles: visión borrosa a lo lejos, necesidad de entrecerrar los ojos para enfocar, fatiga visual, ojos rojos o lagrimeo frecuente. En los niños, puede manifestarse cuando se acercan mucho a la televisión o presentan dificultades para copiar lo que ven en la pizarra. En todos los casos, los especialistas insisten en la importancia de acudir a un óptico-optometrista para una revisión visual completa que permita determinar la graduación exacta.
Causas y factores de riesgo
La miopía tiene un fuerte componente genético, pero el estilo de vida actual —caracterizado por largas horas frente a pantallas y menor exposición a la luz natural— está acelerando su aparición. Según los expertos de General Optica, pasar demasiado tiempo leyendo o utilizando dispositivos electrónicos sin descansos visuales favorece el desarrollo o el aumento de las dioptrías. Por ello, la miopía se considera hoy un problema de salud pública emergente, especialmente entre los menores de 18 años.
¿Se puede prevenir?
Aunque no siempre puede evitarse, sí existen medidas que ayudan a retrasar su aparición o frenar su progresión. Los especialistas recomiendan realizar actividades al aire libre con exposición a la luz solar, limitar el tiempo frente a pantallas y mantener una distancia mínima de 50 centímetros al leer o usar dispositivos electrónicos. También conviene realizar descansos visuales cada 20 minutos mirando hacia lejos y asegurarse de trabajar o estudiar en entornos bien iluminados y sin reflejos.
La alimentación también juega un papel clave. Una dieta rica en vitaminas A, C y E, así como en luteína y zeaxantina (presentes en alimentos como espinacas, zanahorias, pimientos o naranjas), contribuye a mantener la salud ocular y a reducir la fatiga visual.
Revisiones periódicas, la clave
Una detección precoz puede marcar la diferencia. General Optica recomienda una primera revisión visual a los 3 años, otra antes de comenzar la educación primaria (5-6 años) y revisiones anuales hasta finalizar la etapa escolar. En adultos, bastará con una revisión al año, aunque no se presenten síntomas aparentes. Estas visitas no solo permiten ajustar la graduación, sino también detectar posibles complicaciones o patologías asociadas.
Miopía y desarrollo infantil
La miopía suele aparecer entre los 5 y los 10 años, coincidiendo con el inicio de la escolarización. Una iluminación inadecuada, la mala postura al leer o la distancia excesiva de la pizarra pueden acelerar su desarrollo. Por eso, los especialistas insisten en la importancia de la detección temprana, ya que una visión deficiente puede afectar directamente al rendimiento académico. Corregir el problema a tiempo no solo mejora la calidad de vida del niño, sino que puede prevenir el fracaso escolar derivado de un mal diagnóstico.

¿La miopía empeora con el tiempo?
Sí. La miopía tiende a progresar con los años, especialmente en la infancia y adolescencia. Si no se corrige ni se controla adecuadamente, puede derivar en una miopía magna (superior a seis dioptrías), asociada a riesgos más graves como maculopatía miópica, glaucoma o desprendimiento de retina. Por ello, los expertos recomiendan no solo corregir la visión, sino seguir un plan de control de miopía personalizado.
Soluciones y tratamientos disponibles
Hoy en día, existen diferentes métodos para corregir y controlar la miopía, adaptados al estilo de vida y necesidades de cada persona:
- Gafas graduadas: la opción más sencilla y segura, con cristales antirreflejantes y protección UV para mejorar la calidad de visión y reducir el cansancio ocular.
- Lentes de contacto: permiten mayor libertad y comodidad, especialmente en actividades deportivas. Las hay blandas o rígidas, de uso diario, quincenal o mensual, siempre bajo supervisión del óptico-optometrista.
- Lentes de control de miopía: diseñadas específicamente para frenar su progresión, especialmente en niños y adolescentes.
- Orto-K (orthoqueratología): lentes de contacto nocturnas que moldean la córnea durante el sueño, proporcionando buena visión durante el día sin necesidad de gafas o lentillas.
- Cirugía refractiva: opción indicada para adultos con graduaciones estables, que corrige la miopía mediante láser o implantes intraoculares.
La elección del método más adecuado depende de la edad, la graduación y las necesidades del paciente, por lo que es fundamental un asesoramiento profesional individualizado.
Cómo proteger los ojos cada día
Más allá de los tratamientos, cuidar los ojos en el día a día es esencial. Los expertos de General Optica recomiendan:
- No utilizar lentes de contacto más tiempo del indicado.
- Proteger los ojos del sol con gafas homologadas con filtro UV.
- Mantener una buena higiene ocular, evitando frotarse los ojos.
- Controlar la iluminación en espacios de trabajo o estudio.
- Reducir el tiempo frente a pantallas antes de dormir.
En palabras de los expertos de General Optica, “la prevención empieza por una revisión visual”. Cuidar los ojos no es un gesto puntual, sino un hábito que se construye con pequeñas rutinas: mirar más lejos, disfrutar de la luz natural y recordar que una buena visión es, en realidad, una forma de vivir mejor.









