Un LED es una pequeña bombilla que cabe con facilidad en un circuito eléctrico. Estas bombillas no se calientan y son iluminadas por los constantes movimientos de los electrones localizados en el material semiconductor. La vida promedio de un LED es aproximadamente 50.000 horas, y supera la vida de los típicos bombillos incandescentes por varias miles de horas. Hoy en día, puedes encontrar luces LED en una gran variedad de aplicaciones, incluyendo TVs LCDs. Aquí puedes ver modelos de linternas LED.
Existe una muy buena razón de porqué las personas están optando por soluciones costo-efectivas y eficientes energéticamente para sus hogares: estas alternativas de iluminación reducen los gastos mensuales de electricidad y además toman en cuenta el problema de fuentes de energía no-renovables. Los LEDs son las luces más eficientes del mercado, y por mucho, y se han vuelto tan populares que se pueden encontrar con facilidad. Desafortunadamente, estas bombillas innovadoras aún son un misterio para muchas personas, porque su mecanismo es radicalmente diferente que el de las bombillas estándar. Aquí vas a encontrar información detallada de cómo funcionan las luces LED y cómo son capaces de generar iluminación confiable y constante sin ningún tipo de mantenimiento.
La respuesta yace en el nombre las luces: LED significa “light emitting diodes” en inglés, lo que traducido al español seria “diodos que emiten luz”, y se refiere a un tipo especial de diodo que está especialmente creado para proveer luz cuando la electricidad pasa a través de él. Estos diodos son básicamente semiconductores que son usados para controlar la dirección del flujo de luz.
El diodo promedio que emite luz o LED hace esto a través de lo que se conoce como una “unión PN”, el cual está formado por un semiconductor de tipo P (el cual contiene portadores cargados positivamente) y un semiconductor de tipo N (que contiene electrones). La conexión entre estos dos tipos de semiconductores es lo que se conoce como unión PN. Estas uniones son los bloques de cada dispositivo electrónico semiconductor.
Las luces que emiten diodos son modificados con el objetivo de producir una forma de radiación de luz, y los electrones del semiconductor de tipo N simplemente se conectan a los portadores en el semiconductor de tipo P, y el flujo de electricidad es unidireccional: es solo posible desde N a P, no al revés. Cuando se forma la unión, los electrones localizados en el diodo cambian sus estados y comienzan a emitir fotones: electrones que cambian su órbita al moverse de una órbita más alta a una más baja – cuando hacen eso, pierden energía automáticamente en forma de luz. Mientras más energía pierda, más fuertes serán los fotones de luz. Aquí es cuando el color empieza a cambiar y se emite la luz por el LED.
El color que se emite por el LED está influenciado de alguna manera por el material de la bombilla así como también la corriente que corre a través de él. Los materiales semiconductores pueden ser diseñados para limitar la cantidad de energía que fluye a través de ellos, y esto cambiará automáticamente el color de la luz – así es como se obtiene un LED multicolor. Cuando el LED comienza a producir luz, este fenómeno se conoce como “electroluminiscencia”, y esta es diferente de cualquier otro tipo de emisión de luz porque no produce calor. Cuando las bombillas de luz tradicional emiten luz, ese proceso se conoce como “incandescencia” porque emiten calor junto con la luz.
Hablando en forma general, las luces LED están diseñadas para emitir un color de luz, pero con el paso de los años los fabricantes han inventado bombillas bicolores, y los colores más populares son el rojo, verde y azul, y el uso de estas se ha extendido grandemente en la actualidad. Un gran ejemplo de esto son las luces LED sumergibles y los hermosos efectos de luz que se pueden lograr en embarcaciones y piscinas gracias a la flexibilidad y confiabilidad que ofrecen. Aquí puedes ver ejemplos de luces LED sumergibles.
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