Conservar las peras es un método probado para hacer que la fruta dure más y sea comestible. Básicamente, las peras se hierven y se preparan primero de acuerdo con una receta, luego se colocan en frascos limpios, se calientan en una sartén u horno y luego se enfrían nuevamente. Al hervir en un baño de agua caliente, los gérmenes se eliminan completa o en gran parte y se inhiben las enzimas putrefactas.
Por lo general, al igual que otras frutas y verduras, las peras se hierven en una cacerola. Pero también es posible preparar la fruta en el horno. Al hervir, se produce una sobrepresión en el recipiente. El aire se escapa por la tapa, que se puede escuchar como un silbido al hervir.
Cuando se enfría, se forma un vacío en el frasco, que succiona la tapa del vaso y lo cierra herméticamente. Esto significa que las peras se pueden conservar durante varios meses y se pueden disfrutar como guarnición dulce durante mucho tiempo.
Tabla de Contenidos
¿Qué peras son aptas para conservar?
Básicamente, puedes usar todo tipo de peras para conservar. Es mejor si las frutas aún no están completamente maduras. Desafortunadamente, las peras blandas y completamente maduras se cocinan demasiado. Sin embargo, tampoco coseches la fruta demasiado pronto: si las peras aún están demasiado verdes, no tendrán el aroma óptimo. Es ideal si recoges las frutas aproximadamente una semana antes de que estén completamente maduras.
Consejos prácticos sobre enlatado y conservación de las peras
Conservar las peras: la preparación
Los recipientes ideales para hervir peras son frascos con cierre de clip y anillo de goma, frascos con tapa a rosca o con anillos de goma y clips de cierre (los llamados frascos weck). Es mejor usar vasos del mismo tamaño. Porque con diferentes tamaños, el contenido puede perder volumen a diferentes velocidades y el tiempo de ebullición no se puede determinar con precisión.
Es importante para la vida útil de las peras que los frascos de conservas estén absolutamente limpios y que el borde y la tapa del vidrio no estén dañados. Limpia los tarros de cristal con una solución de detergente caliente y enjuágalos con agua caliente.
Ten cuidado si esterilizas los recipientes poco antes de usarlos: coloca los frascos en una cacerola con agua caliente y sumérgelos. Lleva el agua a ebullición y deja reposar los recipientes en el agua hirviendo durante cinco a diez minutos. Saca los frascos con pinzas y escúrrelos sobre un paño de cocina limpio.
Las peras deben lavarse, cortarse por la mitad o en cuartos, pelarse y cortarse el corazón. La preparación varía según la receta.
¿A qué temperatura cocinas las peras?
Puedes hervir las peras en la cacerola o en el horno. Las frutas de pepita, como las peras, deben hervirse entre 80 y 90 grados Celsius durante unos 30 minutos, en el horno son necesarios de 175 a 180 grados Celsius. A partir del momento en el que empiezan a aparecer burbujas al hervirlo en el horno, debes apagar el horno y dejar los frascos en él durante otros 30 minutos.
Receta: reducir las peras como compota
La compota de pera se puede almacenar durante varios meses y es una excelente adición para postres como los pasteles, panqueques o papilla de sémola.
Ingredientes para 3 tarros de conserva de 500 mililitros cada uno:
500 ml de agua
100 g de azúcar
1 rama de canela
Jugo de 1 limón
1 kg de peras
Preparación
Hervir el agua con el azúcar, la ramita de canela y los clavos hasta que el azúcar se haya disuelto. Luego agrega el jugo de limón. Lavar las peras, cortarlas en cuartos, cortar el corazón. Pela las peras y coloca rápidamente los trozos en los vasos preparados.
Es una ventaja si colocas capas de pera. Vierte inmediatamente el agua de azúcar y limón en los recipientes para evitar que las peras se pongan marrones. Las peras deben estar completamente cubiertas con el líquido.
Ten en cuenta: los recipientes solo pueden estar llenos hasta dos o tres centímetros por debajo del borde. Esto es importante porque cuando hierves el líquido puede derramarse. Sella los frascos y cocina la fruta en una cacerola a 80 grados Celsius durante 23 minutos.
Los vasos no deben tocarse en la olla. Vierte suficiente agua en la olla para que un máximo de tres cuartas partes de los recipientes esté en el agua. Pasado el tiempo de ebullición, saca los vasos con pinzas, colócalos sobre un paño húmedo y cúbrelos con otro paño. Esto permite que los vasos se enfríen lentamente. Etiqueta los frascos con el contenido y la fecha de llenado y guárdelos en un lugar fresco y oscuro.
Alternativamente, también puede cocinar las peras en el horno: coloca los vasos llenos de líquido en una sartén llena de agua y deja las peras en el horno a 180 grados centígrados durante unos 30 minutos.
Luego proceda exactamente de la misma manera que cuando hierves en la olla. Consejo muy útil: si las tapas de los frascos de conserva se abren o las tapas de rosca se abultan durante el almacenamiento, debes desechar el contenido.
Receta: Conservar las peras como salsa
El puré de pera se hace relativamente rápido y es particularmente popular entre los niños.
Ingredientes para 3 tarros de conserva de 500 mililitros cada uno:
1,5 kg de peras maduras
Jugo de 3 limones
2 ramas de canela
Cáscara de limón rallada
1 pizca de nuez moscada
300 g de azúcar
Preparación
Lavar, pelar y descorazonar las peras y cortarlas en cubos pequeños. Los cubos se ponen a hervir en una cacerola con un poco de agua, el jugo de limón y las especias y se hierven hasta que estén blandos. Colar las peras junto con las especias para que se forme un puré. Hervir nuevamente la pulpa de la fruta resultante y agregar el azúcar. Revuelve la mezcla hasta que el azúcar se haya disuelto por completo. Luego pon la salsa todavía caliente en los recipientes preparados, ciérrelos bien y déjelos reposar para que se enfríen.
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