Ya es oficial, Europa ha aprobado una ley que obligará a las marcas de tecnología a operar bajo un cargado USB-C para sus dispositivos. Un mismo cargador para todos los gadgets. El acuerdo provisional sobre la modificación de la Directiva de equipos radioeléctricos establece una solución de carga única para determinados dispositivos electrónicos.
Esta ley forma parte de un esfuerzo más amplio de la UE para hacer que los productos de la UE sean más sostenibles, reducir los residuos electrónicos y facilitar la vida de los consumidores.
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USB-C para todos
Con la nueva normativa, los consumidores ya no necesitarán un dispositivo de carga y un cable diferentes cada vez que compren un nuevo aparato, y podrán utilizar un único cargador para todos sus dispositivos electrónicos portátiles de pequeño y mediano tamaño. Los teléfonos móviles, las tabletas, los lectores electrónicos, los auriculares, las cámaras digitales, los auriculares y cascos, las consolas de videojuegos portátiles y los altavoces portátiles que se recarguen mediante un cable tendrán que estar equipados con un puerto USB-C, independientemente de su fabricante. Los ordenadores portátiles también tendrán que adaptarse a los requisitos antes de 40 meses después de la entrada en vigor.
También se armoniza la velocidad de carga para los dispositivos que admiten la carga rápida, lo que permitirá a los usuarios cargar sus dispositivos a la misma velocidad con cualquier cargador compatible.
Mejor información y elección para los consumidores
Los consumidores dispondrán de información clara sobre las características de carga de los nuevos dispositivos, lo que les facilitará saber si sus cargadores actuales son compatibles. Los compradores también podrán elegir si quieren comprar nuevos equipos electrónicos con o sin dispositivo de carga.
Estas nuevas obligaciones conducirán a una mayor reutilización de los cargadores y ayudarán a los consumidores a ahorrar hasta 250 millones de euros al año en la compra de cargadores innecesarios. Se calcula que los cargadores desechados y no utilizados representan unas 11.000 toneladas de residuos electrónicos al año.
Para entidades como ANOVO, empresa especializada en servicios de postventa tecnológica, “la nueva legislación sitúa a Europa a la vanguardia en materia de sostenibilidad dentro de la industria tecnológica”. En este sentido, reconoce que “los primeros que trabajarán en adoptar esta medida serán los fabricantes, que hasta el momento decidían con total libertad cuál era el puerto de carga más conveniente para sus dispositivos”. Los portavoces de ANOVO también apuntan que “muy probablemente, homogeneizar los cargadores en Europa supondrá cambios en el mercado tecnológico a nivel mundial”.
Fomentar la innovación tecnológica
A medida que la tecnología de carga inalámbrica se vaya imponiendo, la Comisión Europea estará facultada para desarrollar los llamados actos delegados, sobre la interoperabilidad de las soluciones de carga.
El ponente del Parlamento, Alex Agius Saliba (S&D, MT), dijo: «¡Hoy hemos hecho realidad el cargador común en Europa! Los consumidores europeos estuvieron frustrados durante mucho tiempo con los múltiples cargadores que se acumulaban con cada nuevo dispositivo. Ahora podrán utilizar un único cargador para todos sus aparatos electrónicos portátiles. Estamos orgullosos de que se incluyan los ordenadores portátiles, los lectores electrónicos, los auriculares, los teclados, los ratones de ordenador y los dispositivos de navegación portátiles, además de los teléfonos inteligentes, las tabletas, las cámaras digitales, los auriculares y cascos, las consolas de videojuegos portátiles y los altavoces portátiles. También hemos añadido disposiciones sobre la carga inalámbrica, que es la siguiente evolución de la tecnología de carga, y hemos mejorado la información y el etiquetado para los consumidores».
Por su parte, los especialistas de ANOVO aseguran que “se trata de una legislación que deberá revisarse y actualizarse al mismo ritmo que lo haga la industria tecnológica”. En concreto, añaden que “es muy probable que en los próximos años el cargador más habitual sea el inalámbrico y eso requerirá de una revisión y actualización del marco regulatorio”.
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