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Definición principal
«La honestidad es el valor de ser sincero, leal y demostrar confianza. Una persona honesta cuenta la verdad en lugar de engañar, mentir o robar; no tiene que esconder nada. Una persona honesta es franca y directa.»
Miguel de Cervantes dijo una vez, “La honestidad es la mejor política”
¿Cómo se puede ser honesto?
La honestidad es una de las virtudes más necesarias si queremos sentirnos bien con nosotros mismos y con nuestras acciones. La honestidad puede tener diferentes graduaciones.
1.Ser honesto con otras personas con respecto a tus acciones. Admitir abiertamente que has cometido un error que causó un impacto negativo.
2.Ser honesto con respecto a tus opiniones y sentimientos. Ser capaz de demostrar a otras personas que hoy puede no ser tu mejor día, expresar tus opiniones sin callarlas por miedo a lo que piense alguien en particular o la sociedad en general. Dejar de considerar la creencia “debe ser lo correcto porque todo el mundo dice/piensa de esa forma”.
3.La honestidad con uno mismo. Necesitamos ser sinceros con nosotros, saber qué sentimos ante determinadas situaciones, qué pensamientos tenemos y cómo nos comportamos. Este tercer grado de honestidad no está presente en muchas personas, causándoles problemas internos ya que sus verdaderos sentimientos y opiniones se encuentran en el subconsciente, sin ser exteriorizados.
Otras pueden decidir expresarlo a través de alguna actividad como el arte. La pintura, las obras realizadas pueden mostrar los sentimientos internos de esa persona.
4. La aceptación incondicional de lo bueno y lo malo. Es mucho más complicado ya que requiere un nivel más profundo de conocimiento interior. Se refiere a la felicidad, al conocimiento, claridad, fuerza… interna, al mismo tiempo que se deben sentir las perturbaciones de la tristeza, la frustración o el miedo. Cuando aprendemos a experimentar y aceptar todas estas sensaciones, estamos siendo completamente honestos.
Si solamente prestamos atención a los estados “buenos” e ignoramos a los “otros” estados, estaríamos mintiéndonos a nosotros mismos y, por lo tanto, dejando de ser honestos.
Importancia de la honestidad
Hay muchas razones para ser una persona honesta. La principal, es para estar en paz con nosotros mismos. La falta de transparencia, el traicionar a otra persona, o el no decir la verdad hace que carguemos con piedras a nuestra espalda que nos dificultan el camino y nos hacen sentir mal. Además, hay que ser conscientes de que la mentira o el engaño, tarde o temprano salen a relucir.
Las personas valoran la sinceridad, la aceptación y el reconocimiento de los errores. El aprender de los fallos anteriores para intentar no volver a cometerlos es una característica muy importante que pocas personas tienen en cuenta. Una persona honesta sabe reconocer cuándo ha realizado un acto incorrecto, para pedir disculpas o realizarlo de nuevo de forma adecuada.
5 motivos por los que ser honesto
- Aporta seguridad. Cuando relatas las experiencias de tu vida, tus vivencias, pasiones o actividades de forma real, la persona que está a tu lado se ve transportada a tu mundo. Si por el contrario, inventas alguna parte, estará falta de contenido o de expresión, denotando desconfianza a quien te escucha.
- Refleja compromiso. Si mantienes la honestidad como piedra angular de tu personalidad y tu vida, generarás confianza en tu entorno. Tanto tu familia, tus amigos como tus compañeros de trabajo o tu jefe, sabrán que te comprometes realmente con tus proyectos y que haces todo lo posible por llevarlos a cabo. Fomentarás mejores relaciones, un clima más seguro y establecerás el trabajo centrado en la solidez de tus acciones.
- Demuestra madurez. Una persona clara, transparente, a la que no le importa comprometerse, demuestra tener claros sus objetivos y metas. Tanto en el ámbito personal como profesional, ser honesto y responsable con lo que se quiere es admirado por los individuos más cercanos.
- Fuente de confianza. Si la persona honesta se da a conocer por este valor, será tenida en cuenta como una fuente de confianza, a la que acudir en caso de necesidad y adversidad. El ser un punto de apoyo o de referencia es muy valioso para el individuo, ya que le ayuda a crecer y fomenta su autoestima y autoconfianza.
- Consecución de objetivos. Una persona honesta consigo misma no tendrá miedo a fracasar, aprender de sus errores y volverlo a intentar una y otra vez hasta que consiga la meta que se ha propuesto. El conocer sus debilidades y fortalezas, saber explotarlas y comprenderlas ayuda a que tarde o temprano consiga lo que se ha propuesto.
Fuentes:
http://www.watertowncsd.org/webpages/chudson/files/what%20is%20honesty1.pdf
https://es.wikipedia.org/wiki/Honestidad
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